dentro de pocas horas...
Durante la cena se nos da conocer el recorrido, donde se viene una zona con
pendiente máxima de 28%, y que tendrá premiación extra para los valientes que se
animen a hacerla. Eso me hace dormir en forma interrumpida... despierto y veo
que son las 04:50 AM.
Por fin! suena mi alarma y me levanto a desayunar puntualmente a las ocho de
la mañana: aunque me ofrecen cereal, huevos fritos, sandwich queso caliente con
jamón voy por lo lo que tengo costumbre, avena con fruta mermelada y algo de
yogurt... Ah! no puede faltar mi café de granos!.
La mañana está algo fría pero promete, pues se ven algunos rayos de sol.
A las 10 am será dada la largada por la organización, como he ido al baño a
última hora, me ubico al final de todos los competidores: mi estrategia es no
salir rápido pues la carrera comienza con subida, pretendo tomar mi propio ritmo.
Antes de recorrer una cuadra, ya he pasado a algunos...
Cuando ya llevo más de media hora de pedaleo en constante subida -asfalto todavía-
he adelantado a varios compedales.
Me siento motivado pues cuando llegamos a un puente -Horcón- veo a un grupo
importante de competidores: un par de ellos son del team Picunches.
Durante la próxima hora mantendremos una distancia constante.
Veo a miembros de la organización que me hacen señas para que tome el desvio y
complete la zona de ascenso más dura del tramo, voy por ella!
Hacemos el ingreso a la viña "Mariposa", es la más alta de Chile!
Hermosos contrastes entre esos majestuosos cerros, la quebrada con su claro
sonido del agua, y el sendero.
Empiezo a transpirar "como testigo falso", la subida es dura, pero no me rindo.
Veo a mi amigo Aleko que viene en una camioneta tomando fotos, le grito
"tómame rápido una foto para poder parar!".
Veo que una joven ciclista se cae, le pregunto si se encuentra bien, y seguidamente
de saber que no tiene problemas le digo "el que no se ha caido por usar fijaciones
no es ciclista..." unos 200 metros más arriba me caigo yo.
El esfuerzo me quiere pasar la cuenta... "falta poco" me gritan algunos que ya
vienen de vuelta, 2km que se me hacen eternos...
Por más que alzo la mirada no veo el punto de control. Y llego! ahí están
recuperando energías e hidratándose, los dos amigos de Picunches que no pude
alcanzar.
El descenso es hermoso (sobre todo después de haberlo subido!): paso entre las
viñas que se ven en la fotografía, a medida que me cruzo con los que suben les grito
una palabra de ánimo... sus caras lo dicen todo, muchos ya caminan con su cleta
al lado.
Disfruto de esa bajada, me siento seguro al descender velozmente!
Continuó ya hacia la meta que se encuentra donde termina el camino interior de este valle. ¿Por qué será que después de una bajada larga uno ya no quiere volver a subir?
No estoy acalambrado y siento que puedo seguir dando una buena carrera.
Y finalizo! Me siento contento con lo hecho. Converso con los que aun descansan, tomo algunas fotos, cargo mi caramaiola con algo de isotónica y me hago a la idea de retornar pues esos 28 km no están en la zona de largada...
Cuando llego finalmente a Pisco Elqui, son recién pasada la una de la tarde,
hay tiempo antes del almuerzo para un "crio-masaje" (con hielo).
Se han completado 46km de esta primera etapa.
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